19.5.09

Qué no ves

De chiquita me sentía diferente, en mi casa era diferente a mis hermanos, ya sea porque son mucho mayores que yo y porque no son como yo, por ende era la más mimada y hasta malcriada. Cuando entré al jardín yo seguía sintiéndome anormal a todos los nenes que se divertían comiéndose los mocos. Mientras ellos lloraban porque no tenían con quién jugar yo me podía pasar horas y horas encerrada en cuatro paredes, haciendo algo o no. Para cuando tenía no sé siete u ocho años ya mi cerebro se había adaptado a las boludeces tipo Bandana y había encerrado a mi persona anormal en una pequeña jaula que a veces quedaba abierta "por accidente"; y cuando eso pasaba yo me ponía a leer y a pintar bla bla, no por nada me leí más de cincuenta libros en un año teniendo nueve años. Encima para esa edad se me estaba pasando a etapa dibujitos animados y me gustaba ver canales musicales, y ahí fue cuando me convertí en una fanática-obsesiva de los arctic monkeys, babasónicos, the strokes etc. Así que yo, la nena de once años, come libros. y fanática de bandas que ni el loro conocía (o por lo menos de la gente que yo conocía) se sentía apartada y por consecuente me tuve que adaptar otra vez a la gente de mi alrededor. Pero bueno sobreviví, a la fuerza pero lo hice. Y gracias al cielo ya no me importa que me critiquen lo que me gusta ellos se lo pierden, y más gracias al cielo porque encontré gente como yo, que le gusta lo mismo y por lo menos de vez en cuando puedo hablar de una buena película (sí, también me había enamorado del cine desde que era un piojo) y no de lo bueno que está el flaco de la esquina.
En resumen soy una enamorada del cine independiente y clásico (viejitos pero buenitos che), del indie rock (), y de estar sola .

1 comentario:

refi : ) dijo...

yo te amo como sos deforme :) gracias por hacerme bajar de peso en esa interminable caminata y por compartirme a tu fabi jaja